Hola a todos, hoy me toca hablar desde mi experiencia con la introducción de alimentos sólidos en la alimentación del bebé.
Ahora mismo tengo un bebé que va a cumplir 4 meses la cual se alimenta de lactancia materna exclusiva (LME), y un niño de 2 añitos y medio, el cual comenzó con la introducción de los alimentos sólidos a los 6 meses, sin dejar de lado la lactancia materna, por supuesto.
Ante todo, he de confesar que me informé mucho acerca del "BABY LED WEANING", esa era en principio nuestra idea de alimentar a nuestro hijo, o mejor dicho, la idea que teníamos de aprendizaje con los primeros alimentos de "mayores".
Confieso que me empapé, leyendo blogs, artículos... y que al final NO LO HICE.
Está claro que no todos los niños son iguales, cada uno crece a un ritmo diferente, cada uno tiene un carácter, sigue unas pautas, es más o menos tranquilo... y por lo tanto, aunque ésta técnica es supuestamente la más "natural" para que los niños aprendan a comer, he de decir que en nuestro caso no funcionó. Ahora no voy a entrar en si lo hicimos mejor o peor, nosotros como padres lo intentamos de la mejor manera que vimos y pudimos.
Un padre sabe si su hijo está o no realmente preparado para llevarse cosas a la boca solo, si va a saber tragárselo... bueno, un bebé de 6 meses por acto reflejo regurgita cuando algo se le queda en la garganta, pero ésto no significa que siempre vaya a salir lo que se ha quedado atrancado...
Ese en realidad no era ningún miedo que tuviera, la "preocupación" por llamarlo de alguna manera, era que mi niño no se alimentaba correctamente.
Es decir, le ponías cosas en la mesa y acababa todo prácticamente en el suelo, y lo que se metía no lo comía, lo escupía, está bien por supuesto experimentar, aprender, jugar a tocar la comida, que ellos sean los que se empapen y ellos sean los que con sus 5 sentidos aprendan todo.
Pero en nuestro caso, y reitero con ésto porque seguro alguien me dice, eh, que mis hijos se han alimentado así, qué dices!!! no, no os alteréis, lo que yo digo es que en nuestro caso, nuestro hijo no comía, que es al fin y al cabo de lo que se trata, era todo un juego, y poco comer, por así llamarlo.
Así que pasamos al plan B, es decir, la papilla de toda la vida, vale, venga, no de toda la vida, pero sí la papilla que comía mi madre y la papilla que comía yo de bebé, pues esa papilla.
Empezamos con la fruta, de a poquito, como he dicho sin dejar el pecho, ya que mi niño aun se alimentaba principalmente de eso, y a parte estaba muy contenta porque él comía su frutilla, su pera, su manzana....
Las verduritas, zanahoria, tomate.... las patatas...
Al poco comenzamos con pescados, tipo lenguado, merluza...
Lo que quiero decir con ésto es que os centréis en lo que vuestro hijo/a quiere o necesita y no en lo que vosotros queréis, en este caso yo estaba decidida a alimentarle de una manera que no le beneficiaba, o al menos así lo veía yo... ya que no engullir ni un trocito de nada para mi no era ninguna introducción de alimentos.
Ahora con mi hija lo intentaré de nuevo, al "BABY LED WEANING" me refiero, pero sin que para mi suponga una obligación ni una tortura el momento de comer, si come y va bien perfecto, si no, una papilla casera deliciosa y al canto.
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